A los "gurúes"

Marketing, un concepto nuevo de una sociedad moderna, siniestro a mi entender, que busca a través de diferentes tipos de estímulos poder encaminar el inconsciente colectivo a la conveniencia de quienes lo modelan.
Esta vez los "pensantes", manejadores de las estadísticas han tomado una desagradable decisión pensando en el lucro y no centrándose en el real sentido de un programa, que seguramente estaba dirigido a académicos o gente del pensar, pero no se detuvieron o no pensaron que el hambre de encontrar programas que realmente incentiven el saber y la cultura, o simplemente admirar la belleza de pensar está en muchos, que quizás no somos grandes pensadores, pero si jóvenes saturados de una televisión mediocre, que no deja más que una sensación de vacío. Programas que entregan cada cierto tiempo un nuevo ritmo pegajoso y vendedor o una entretenida manera de aprender como construir una casa y admirar como la competencia por un fin material desvirtúa los valores de convivencia humana .Bueno a ellos me dirijo, a los "gurúes" de la entretención.

Señores, sepan que existimos quienes admiramos el pensar y admiramos a un entrevistador que se empapa del saber en función de sus televidentes. No maten un espacio donde la belleza de pensar se ha convertido en un hecho.

Cristian, quizás para incluso sorpresa tuya somos muchos lo jóvenes que admiramos tu talento y tu entrega en cada programa; todavía quedamos quienes apreciamos el pensar.

Sebastián Parada

Anónimos, pero no grises ni oscuros

Anoche varios anónimos, anónimos pero no grises, estuvimos en el Mosqueto compartiendo con Cristian Warnken.

Conversación fluída, sencilla, amistosa y cariñosa.
El entrevistador amable, preparado y respetuoso, tuvo la grandeza de responder él a nuestras preguntas.

Se equivocan los genios del marketing, se equivocan y al perseverar en el error muestran con mayor fuerza su pequeñez.

Y aquí estamos, aun pegados a este blog, ansiosos de recibir la buena noticia. Si Cristian, la vigilia continúa, no es moda pasajera como pueden pensar algunos simplistas, es la convicción de saber que TU programa es necesario para llevar algo de valor a nuestra alma nacional, a nuestra alma ciudadana.

La llama sigue encendida.

Cristian, Continúa el "tráfico" de grabaciones caseras de tu programa.

Ojalá el mundo académico se pronunciara.
Por ahora debes conformarte con el reconocimiento espontáneo de tus televidentes.

Con FE lo imposible soñar,
Al mal combatir sin temor

gerardo donoso

Sancho te responde

Tomado del Blog de emol.com

A Cristián y todos los acongojados aficionados a la "belleza de pensar" les dirijo las palabras de Sancho a Don Quijote en su lecho de muerte:
"-¡Ay! -respondió Sancho llorando-: No se muera vuestra merced, señor mío, sino tome mi consejo, y viva muchos años; porque la mayor locura que puede hacer un hombre en esta vida es dejarse morir, sin más ni más, sin que nadie le mate, ni otras manos le acaben que las de la melancolía.
Mire no sea perezoso, sino levántese desa cama, y vámonos al campo vestidos de pastores, como tenemos concertado: quizá tras de alguna mata hallaremos a la señora Dulcinea desencantada, que no haya más que ver. Si es que se muere de pesar de verse vencido, écheme a mí la culpa, diciendo que por haber yo cinchado mal a Rocinante le derribaron; cuanto más que vuestra merced habrá visto en sus libros de caballerías ser cosa ordinaria derribarse unos caballeros a otros, y el que es vencido hoy ser vencedor mañana."
La "Belleza de Pensar" prevalecerá, no os preocupeis mis señores...

Posteado por:
Marcelo Jara Abalos (Marzo 26, 2006 07:16 PM)

La Fealdad de NO Pensar

Tomado del diario La Nación.

Eduardo Labarca

A Cristián Warnken le quitan su programa “La belleza de pensar” en el cable: a nosotros nos quitan a Warnken. Mantuvo sus entrevistas a personajes de la cultura a lo largo de diez años: un milagro. Un Warnken sin pausas comerciales de analgésicos o detergentes en medio de tanta farándula: bicho raro. La estocada llegó del lado del pensamiento feo: previsible.

La marca del programa pertenece al canal: lógica de gerentes. El canal quiere comercializar las antiguas entrevistas de Warnken: negocio ante todo. Warnken se niega: lealtad con los entrevistados. El canal intenta seguir con el programa sin Warnken: ni pies ni cabeza. Reflexionen quienes no han visto el programa de Warnken: ¿“El show de los libros” sin Antonio Skármeta o “Sábados Gigantes” sin Don Francisco? En Francia el programa literario “Apostrophes” cerró el día en que Bernard Pivot decidió retirarse: duró 15 años. Todos entendimos que “Apostrophes” sin Pivot no habría sido “Apostrophes”: hubo tristeza esa noche.

“La belleza de pensar” sin Warnken: no sería “La belleza de pensar”. Que surjan programas culturales en la televisión chilena: enhorabuena. Que alguien trate de reemplazar a Warnken imitándolo: grotesco. El nombre del programa de Warnken: no me parece decisivo. Lo decisivo es que Warnken siga en la televisión con sus entrevistas a fondo: no importa cómo se llamen. Donde vaya Cristián Warnken irá la belleza de pensar y no estará solo: allí lo seguiremos.

Hagamos que las cosas pasen

En este blog, simple, sencillo, hecho por un inexperto en gráfica, estilo y diseño puedes exponer lo que sientes y opinas sobre el programa La Belleza de Pensar de Cristian Warnken .

Que se note que hay gente que valora, aprecia y agradece el trabajo de Crisitian.

Que se entienda que la Belleza no es una Marca, ni un producto, ni una acción en la Bolsa.

Fuera los mercaderes del templo... fuera...!!!

Sólo pido mantener los comentarios dentro de un marco razonable de discusión, para que los infaltables no nos descalifiquen "por las formas usadas".

Cristian... descuida este no es un movimiento ni nada.... somos los que ocupamos la tercera silla en el set de grabación, el telespectador, los habemos viejos, jóvenes, hombres, mujeres, gordos, flacos, pelados y chascones, lanas y cuicos... ignorantes unos y sabios otros, somos gente.

Un abrazo a todos... !!!
Y hagamos que las cosas pasen...!!! que siga en el aire La Belleza de Pensar con Cristian Warnken.

Gerardo Donoso